Mi primera vez corrió a cuenta de Don Roberto el mecánico, un señor de 53 años que se llevó mi virginidad. Luego de aquella vez, yo pasaba seguido por él taller mecánico los viernes a la noche o los domingos. Era en esos días que organizaba nuestros encuentro; yo me había convertido en el amante de Don Roberto y yo estaba encantado con él pues me enseñó muchas posiciones además que lo hacíamos en él auto, en su oficina, en la fosa mecánica en fin, el viejo tenia la mucha experiencia.
Meses después Don Roberto me confesó que los muchachos, sus empleados, preguntaban por mi.
R- preguntan por ti porque se dieron cuenta que te cojo, no son tontos.
Yo estaba colorado y le pregunté si es malo eso, «no quédate tranquila, putita, los muchachos son de confianza, también son de onda y siempre nos cogemos minas, travas, putitos como vos aveces lo enfiestamos. De hecho Mario te quiere coger y el Juan que le chupes la pija y te tragues su leche. Te queremos enfiestar los tres.»
Yo no sabía qué decir, pero él me citó para el viernes «ahí te presento a uno y te dejo con alguno de los dos, no sé, tú eliges, y se van conociendo yo los dejo y me doy una vuelta… ¿o preferís que este con vos ahí?»
— No se no me animo
— dale bebé, yo le hablé a los muchachos de vos y están locos por probar esa cola, dicen que con una tanga te cojen con mas ganas… ¿queres? Mario le dio la idea a Roberto y le dio una tanga roja para que la use él día yo él día que me coja .
Y bueno accedí a que Mario me cogiera, pero con la presencia de Don Roberto que se fue a la oficina y nos dejo tranquilo para que Mario me diera tronco. Bueno, ya estaba ahí le quise besar y no se dejó me dijo que le gusta que le chupen la pija. Él andaba con un pantalón de gym gris y una camiseta de River Plate, eso me excitó mucho, ya que se le notaba el bulto.
Ahí me dice «mira lo que tengo para vos» y se la saca y la empieza a agitar y la pone en la palma de su mano «vení, chúpala guachin y espero que me la chupes como se la chupas a Robert»; yo ya me había desafiado y esa pija me encantaba, era larga pero algo fina, como de 17 cm pero que se dejaba saborear y bien me hacia atragantar. Él me decía que la lamiera toda , «pasále la lenguita por la puntita, así bebé, qué rico la chupas, ahora chúpame los huevos que me encanta» mientras me agarraba la cabeza.
Cuando le estaba chupando la punta fuertemente me empujaba la cabeza y me daba arcadas, pero me gustaba; así como media hora chupándole la pija pero yo la quería sentir mi cola, quería probar esa chota y él se dio cuenta de ello y me dice «pedime que te coja, dale… eso me calienta, me caliento mucho cuando me piden por favor que los coja… dale pedime que te coja, puto».
— Cógeme, cógeme por favor .
Yo arrodillado y él sentado en un auto con la puerta abierta mientras yo le chupaba la pija y le pedía por favor que me coja . Hasta que se saca del todo él pantalón gris y del bolsillo trasero con cierre saca la billetera, la abre y saca un forro y sobrecitos de Gel.
Me pregunta «¿sabes poner él forro (preservativo) con la boca?». «No, ni idea», dije yo. No le importó, estaba re caliente «te quiero hacer esa colita aunque ya te la hecho el patrón, putita… sos la hembrita del patrón ,ahora vas a ser mía también putita».
Yo me re calentaba más cuando me decía «así, imagínate las hormonas de un pibe de 16 años que probó la pija y se hizo adicto a ella». Entonces sale del auto y me dice «te tengo una sorpresa putita», y llama a Roberto.
— Haceme un favor y traeme lo que te di para tu hembrita — y lo veo venir a Roberto con algo rojo en la mano y le dice toma .
Me pregunta si estoy bien. «¿Lo disfrutas mi amor?»
«Sí» le digo, y él responde «bueno, haceme quedar bien que yo le hable muy bien de vos, no me falles bebé, me voy pero si necesitas un segundo ahí estoy, llámame».
Entonces me desvistó todo y Mario me hace poner la tanga roja y me dice que entre al auto en cuatro patas y deje el culito para afuera y me empieza a morder las nalgas, me corre la tanga y me pone gel y empieza a bombearme fuerte. Yo estaba dilatado por dentro, aparte no la sentía como la de Don Roberto, pero me hacía gozar, y mientras me cogía él con la camiseta de River me dice «vos sos un puto bostero ,y a los de boca juniors me encanta cojermelos porque son todos putos, como vos siempre que jugamos le rompemos la cola» y así me cogía fuerte con la tanga para un costado hasta que me agarra de los pelos y siento que esta por acabar y dice «que lindo orto que tenes putito, con Razón sos la puta de Rober».
Antes de acabar alcanzó a llamar a Roberto y le dice «mira Robert me cogí a tu puta, mira como le deje la colita» y Roberto me dice «que hermoso te queda esa tanguita… viste que lindo le queda» le confirma Mario «mi puta tiene un buen culo, pero tiene mi sello, es de mi propiedad y vos Mario sos amigo por eso te la prestó pero esa boca es mia» dice Roberto.
Ahí entendí porque Mario no me quería besar. Mario terminó dentro de mi, se va al baño, se lava y yo me quedo con Don Roberto hablando de que si me había gustado. Yo me iba a parar para cambiarme y Roberto me dice «quédate así un ratito, bebé, me gusta como te queda, a ver saca la colita a papito, dale» Y le saco colita con la tanga puesta.
Él me nalguea los cachetes y yo ya me estaba excitando nuevamente ya que yo no había acabado. Sale Mario del baño y le dice a Roberto que se iba. Roberto cierra la puertita de la persiana y viene hacia a mi y me dice «me encantó como gemías con Mario, te quiero coger» y me corrió la tanga y me dio duro… yo gemía como me una perra.
Don Roberto me la hacia sentir ,me cogió todo y me acabó en la colita. Terminamos exhaustos con culo para arriba chorreando la leche de Don Roberto mi mecánico.
Me dice «otro día tenemos que arreglar y le chupas la pija a Juan, ese si tiene lo suyo eh, te la vas aguantar bebé?». Juan tiene unos músculos y es morocho, nunca me cogió un morocho. «Después me gustaría que te cojamos los tres, pero vas a hacer lo que yo diga si?» remató Roberto.