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Por andar espiando a mi compañero de clase

Apenas llegaríamos a los catorce cuando ocurrió esta historia en la que, por primera vez, descubrí lo que suponía el deseo carnal más voraz y excitante. Había un chico nuevo…

Mi vecino se queda sin agua y pide usar mi regadera

Había llegado el verano a la ciudad. El lugar donde vivo era demasiado caluroso. Normalmente los termómetros se elevan arriba de los 42 grados… ¡muy desagradable para los que aborrecemos…

Le encontré el lado gay a jugar rugby

De Alicante a Las Palmas de Gran Canaria sólo hay dos horas y media de vuelo pero se me hicieron eternas, las turbulencias me aterrorizaban y mi miedo a volar…

Bañándome con mi vecinito

Luego de lo que vivi con mis niños, ufff quede exahusto y muy satisfecho, pero la historia no termina ahi. Despues de varias semanas, un dia sabado habia un calor…

Gozando en las regaderas del balneario

Tengo 18 años. Un día en vacaciones de verano mi familia decidió que saldríamos de viaje, iríamos a un balneario (Las termas). Llegando al balneario nos divertimos como nunca, gozamos…

El vigilante nocturno

Soy vigilante de una empresa de autobuses mi complexión es normal, vergudo y carismático por si alguien cae. me veo bastante bien a mis 42 años. Dentro de mis activides…

Bañándome junto a mi papá

Mi papá tomaba mucho y a veces se perdía en el alcohol, y entonces se me ocurrió que esa era mi oportunidad ya que mi mamá siempre me mandaba a cuidarlo que no se cayera y que a dónde iba lo siguiera.

En los baños del gimnasio

Las miradas de ambos se cruzaron bajo el agua de las duchas. No sabía qué hacer, pero sentía que iba a estallar. Sin que el contacto visual desapareciese, lo vio atravesar la distancia que los separaba. El aire se negaba a abandonar los pulmones de Jaime.

El nalgón que me cautivó

Al verme ahí me da la espalda y lentamente baja la licra liberando sus glúteos rasurados con algo de estrías pero perfectas, para una nalgada y mordida.

error: ¡Hey! Jálatela, no te los lleves.