🔥 Un relato exclusivo de Relaróticos 🔥

Todo en empezó hace algunos años; debo aclarar que siempre eh sido grande; me describo soy alto, grueso, piel clara, cabello castaño, ojo miel, 18cm de verga con un grueso considerable y soy velludo.

A mi tío lo conocí hace varios años, ahora tengo 22, la primera vez que lo ví fue en la casa de una prima, ahí me enteré de su existencia y cuando lo ví era un manjar: alto, moreno claro, de esos cuerpo que eran de gym pero con unos kilos de más, era un monumento y además me miraba muy morboso, se agarraba la verga y se alzó la camisa mientras se sobaba el pecho, todo con cautela ya que andamos en la terraza de la casa de mi prima.

A la reunión de rato llegaron varios amigos así que me distraje y lo perdí. Pasaron varios días hasta que lo ví en la tienda donde me saludo y me regaló un bombón, y me dijo:

Tío: ¿qué estás haciendo?
yo: jugando, nomas.
Tío: ¿y en dónde vives?
Yo: bajando varias casa de dónde vive mi prima y su nieto
Tío: a ok, ya bueno yo vivo acá a la vuelta, ¿me puedes hacer un favor?
Yo: si claro
Tío: es que no encuentro hielo para el jugo, puedes comprar uno por hay y llevármelo yo te doy $1000 pesos pero me lo tienes que llevar a la casa.
Yo: bueno está bien.

Y entonces salí a buscar el hielo por la cuadra hasta que encontré y me dispuse a ir a su casa a llevarlo.

Yo: buenas señor, E (tío)
Tío: mijo entre, estoy en la cocina tráelo.

Cuando entré noté que vivía solo.

Tío: gracias, ya te doy tus $1000 voy al cuarto
Yo: bueno está bien
Tío: siéntate en la silla

Me senté a esperar que saliera para darme mi propina por el mandado.

Tio: mijo, entra acá al cuarto aquí tienes tus $1000 pesos, que tengo las manos ocupadas.

Cuando entro a la habitación estaba la luz apagada, pero entraba luz

Tío: mijo ayúdame y coja los 1000 pesos, están abajo de esto que estoy alzando (alzaba algo como especie de una maleta) y para poner coger el dinero tenía que darle la espalda.

Me metí entre sus brazos quedando totalmente delante de él cuando me dice.

Tío: empínate para que alcance

Cuando lo hago siento su verga de algunos 16 cm y de grosor normal, yo me hago el bobo y le digo que no los encuentro. Él solo me dijo “sigue buscando” y mientras estaba empinado me la pegaba más haciendo que yo ya estuviera muy excitado; así pasamos varios minutos, ya no puede más y le dije que sentía algo en mi espalda baja, y me dice que es su juguete, y valiéndome todo se lo agarré, él bajó sus mano y me comenzó a tocar mi cuerpo.

Él me dijo “acuéstate en esta colchoneta” y así lo hice, al tiempo que empezó él a tocarme y quitarme la ropa dejando solo mi trusa de carritos rojos. En cambio él se quitó el short y veo que no tiene bóxer por lo que de inmediato veo que sale ese pene moreno y enorme en comparación con el mío que aún no se desarrollaba.

Me dio miedo cuando yo me lo quedé mirando y me dice “chúpalo como chupabas el bombón” pero lleno de morbo me arrodillé y me lo llevé a la boca. No lo hice mal ya que era la segunda vez que me llevaba un pene a la boca, me dió asco pero sentí que con su mano tocaba mis nalguitas virgen y fue bajando mi pantaloncillo para seguirme accariciando suave las nalguitas.

Fue cuando me voltea y me acuesta boca abajo; me abrió mi nalguitas y soba con su dedo mi ano virgen. Sentí entonces algo húmedo entre mis nalgas, volteo y miro me estaba chupando mi culito provocando en mi un montón de emociones. Así estuvo varios minutos cuando me voltea y quedando boca arriba, alza mis piernas y comienza a rozar su verga con mi culito.

Entonces sentí un empujón en mi ano le dije que me dolía y siento el segundo empujón que grité duro y me tapó la boca y me dije que no gritara. Al ver que mi culo no iba a ceder a su verga me dice que se la chupe, está vez se acostó y me montó encima de él quedando en 69. Ese hombre jugaba con mi nalguitas y después de varios minutos me levanta y se comienza masturbar (aún recuerdo sus gestos y su respiración) en frente de mi cara acabando luego de 5 minutos y sentí entonces algo que cae en mi cara.

Cuando abrí los ojos vi que era su leche caliente en mi cara, cosa que me dió asco y casi vomito. Total, él me limpió y luego sacó del bolsillo de la pantalón un billete de 5000 pesos y me dijo “sal y siéntate en la sala, pero que nadie vea”.

Luego me dijo “si quieres que te dé más plata ven hacerme los mandados, pero no le digas a nadie, ¿va?” a lo que le respondí que estuviera tranquilo, pues no le diría nada a nadie.

Salí del cuarto senté espere como 5 minuto y él se asomó en la puerta y vio que que no había nadie y me dijo “ya te puedes ir” así que me levanté y cuando voy camino a puerta me dice “mijo, me lo cuidas que desde hoy ya es mío” agarrándome el culito que lo llevaba bien baboso.

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