Un relato de @PutiRelatos
Esto empieza hace como 3 meses, aún en cuarentena, todos nos encontrábamos en casa. Yo soy un chico alto medio fornido, moreno y mi papá es de mi misma estatura, medio fortachón porque trabaja en la construcción. Por lo mismo siempre se ha visto muy masculino y serio.
A papá lo he visto desnudo por accidente pero nada importante, solo él y su pene flácido un día por la mañana que me despertaba para ir a trabajar, puesto que trabajo con él.
Pese a estar muy cansado por el trabajo, como siempre por las noches como todo chico adolescente estaba muy erecto; una de esas veces que yo dormía bajo mis sábanas sentí que él entra a la habitación, llega y me dice «es hora de irnos».
Yo no hacía caso cuando de pronto siento que agarra mi bulto erecto y lo juega un poco y dice despacio «sí que saliste igual a tu papá». Yo, ya más despierto, me sorprendí al sentir eso de él. De hecho durante todo el día en el trabajo pensaba una y otra vez el como me agarró el pene y entre más lo pensaba más duro me ponía.
Por la actividad del día, siempre llegamos sucios del trabajo a la casa y lo más normal del día es llegar a bañarnos y luego cenar. Luego, un sábado de paga, me invitan unos amigos a tomar cerca a un bar así que yo llevaba prisa en mi casa por bañarme, alistarme e irme con ellos.
Al entrar a la ducha tocan la puerta, era mi papá que necesitaba entrar al baño, me volvió a dar vueltas en la cabeza lo sucedido días pasados así que le dije que estaba bien, que pasara al baño.
Yo, sabiendo lo que quería hacer, dejé un poco abierta la cortina de la regadera para que pudiera ver. Yo ya tenía una erección tan dura
que me palpitaba de nervios al saber que estaba mi papá ahí.
LO MÁS RECIENTE
Mientras yo me enjabono, obvio no veía nada ni escuché a mi papá, pero de repente siento que agarran mi verga y escucho «Sin duda es igual que la mía». cuando me enjuagué la cara volteo y estaba él sosteniendo mi verga y pajeando la suya.
Nunca la había visto erecta pero ese día quedé sorprendido, se le empezó hacer dura y vi que realmente eran iguales nuestras vergas, ambas largas curvadas hacia abajo solo que la de él torcida a la izquierda y muy gruesa.
Me quedé sorprendido y lo seguí viendo cuando él me hace la seña que no haga ruido, se desviste y entra conmigo a la ducha y ya ahí me la empieza a jalar poco a poco. No les miento, yo sentía tan rico que sus manos tan grandes me tocaran la verga, estaba tan excitado y nervioso a la vez.
Empiezo a lubricar y con su dedo empieza a sobar la cabeza de mi verga; luego él toma mi mano y me dice «tócala» a lo que yo con miedo la toco y pude sentir su calor y el palpitar de esa gran verga.
Aclaro que soy activo y no imaginaba que pudieran pasar más cosas con mi papa más que ese morbo de ver su verga parada ya que mis padres aún no saben nada de mi.
Ambos estábamos gozando y masturbándonos cuando me dice «has de hacer feliz a muchas viejas con ella» a lo que yo solo le sonrío y moviendo la cabeza le digo que sí.
Empezamos a jalar más fuerte entre el agua caliente y veo que empieza a gemir. Yo me imaginé que estaba por correrse cuando de pronto avienta chorros de leche, tanta que a distancia salpicaba mi abdomen y piernas. Fue al ver que se corría que sentí como mi leche también hacia presión por salir.
Él con sus mano empieza a jalar y jalar mi miembro mientras yo sentía como su mano apretaba rico mi verga hasta que me corrí e igual lo salpiqué todo mientras él seguía gimiendo de la sacada de leche.
Me ve y me dice «ese es mi hijo, igual de caliente que su papá». Yo solo sonreí y le dije»Tengo que irme». Él se quedó en la ducha por que seguía de hacerlo.
Salí sin que mi familia se de cuenta y me fui al bar con mis amigos. Desde ese entonces nos hemos pajeado 3 veces viendo porno o solos.
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