El doctor del cine porno
Me gustaba frecuentar los cines porno porque sin siquiera tener que hablar conseguías que te dieran una buena mamada de verga, o te volvías voyerista… ahí lo encontré a él. Todo un adonis.
Relatos eróticos gay en español
Me gustaba frecuentar los cines porno porque sin siquiera tener que hablar conseguías que te dieran una buena mamada de verga, o te volvías voyerista… ahí lo encontré a él. Todo un adonis.
Cuando iba en la prepa, entró un nuevo maestro a dar clases de inglés. Su nombre es Erick , el cual, era alto muy alto, tenía sus brazos enormes y marcados, siempre vestía un pantalón negro, una camisa morada y un chaleco, hasta parecía caricatura.
Me siento muy orgulloso de haberme cogido al padre de mi mejor amigo, pero es un secreto que juramos guardar y practicar cada vez que no haya nadie en la casa. Además, Guille me mataría si se enterara.
A los 13 años, estaba yo de vacaciones con mi abuela, y en el barrio había un hombre mayor, de unos 45 años, musculoso, muy lindo de cara, que siempre venía a visitar a mi abuela y se quedaba un rato viendo la TV con ella.
Me llamo Andrés, tengo 27 años y vivo en Santa Fe. Esto que les voy a contar me pasó hace como dos años y fue la experiencia homosexual más increíble que he tenido hasta ahora…
Me invitaron a pasar unos días con mi tío y su familia y cuál sería mi sorpresa que estando ahí le dejé ir la verga a mi tío.
Desde mi adolescencia, ya consciente de mi especial atracción por los hombres maduros y de aspecto viril; mi vista no pudo evitar ser capturada por la imagen de aquel hombre de la panadería cercana al lugar donde recién me había mudado.