Les contaré del día que un empleado «hetero» de mi papá me cogió en su camioneta.
Lo que les voy a contar pasó hace unos años, yo en esa época tenía 17 (ahora tengo 21), soy de Jalisco MX, alto, delgado, moreno claro y no es por sonar egocéntrico pero soy guapo, tengo facciones muy finas y marcadas.
Para entonces ya había tenido varios encuentros con hombres, pero nadie sabía sobre mis gustos, de hecho ni yo mismo sabia qué pedo conmigo. Esto pasó un día que estábamos en un rancho en Zacatecas, Ramiro era un empleado de mi papá entonces, él tenía 27 años, era alto, como de 1.80, de complexión media, moreno claro, varonil y era muy bromista, tenía mucho sentido del humor. En ese momento estaban trabajando en un jaripeo que había por las fiestas de la ciudad, nos teníamos agregados en WhatsApp y yo estaba cerca de mi papá y los demás empleados, que por cierto todos eran muy machos, en eso me llega un mensaje de Ramiro y me saluda, le contesto e intercambiamos un par de mensajes equis y luego me dice «ando bien caliente hace mucho que no cojo, me haces el paro o que» y yo tomándolo a broma le contesto «Solamente jalo con 25 cm o más».
Como estábamos cerca físicamente podía ir viendo sus reacciones mientras leía sus mensajes. Así, mientras sonreía me respondió «24 te sirven?» Y entonces le trate de cambiar el tema por qué no sabía si era verdad o no y no quería quedar en evidencia sobre si me gustaban los hombres así que le respondí «pues tal vez si jaja. Tengo mucho sueño ya me quiero ir» y él me contestó «Si me haces el favor entonces? Le digo a tu papá que iremos comprar cerveza y me llevo su camioneta» y yo le dije que sí, así sin pensarlo.
Todo fue tan de repente que de un momento a otro cruzó el trecho qué nos separaba, se acercó a mi papá y le pidió prestada la camioneta para irnos con ese pretexto ya que al ser un rancho las tiendas de cerveza estaban como a 10 minutos de distancia, mi papá accedio le dió las llaves y entonces me habló y me dijo frente a todos, «me acompañas?» Y pues le dije que si, estaba un poco desconcertado ya que no sabia lo que iba a suceder y más con él que siempre fue muy cercano a mi papá pero a la vez me excitaba y yo también tenía ganas de coger.
Nos subimos a la camioneta y nos quedamos en silencio, salimos del rancho y me sacó tema de conversación equis, y en eso me dice, «entonces que? Si vas a querer?» Y solo sonrei nervioso y no dije nada y me dijo «agárrala» y sujetó mi mano y la puso en su bulto el cual entonces empecé a acariciarlo y rápidamente su pene se empezó a poner duro.
Estábamos todavía en camino así que mejor decidió apagar las luces y salirse hacia un camino poco transitado y con árboles altos qué harían qué nadie nos viera. Ya ahí volteó a verme y me dijo «recorrete más hacia mi para que lo agarres bien». Yo ya no obedecía a mi mismo sino a su sexy voz, así que me acerque más y empezó a desabrocharse el cinturón y el pantalón y entonces se lo sacó, era un pene como dijo de 24 cm, ancho y estaba muy erecto.
Verlo ahí, con sus pantalones Levis a medio bajar, unas truzas Hanes blancas y su camisa a cuadros medio sudada y semi abierta dejando al aire su pecho tostado por el sol y velludo de la parte superior me tenia totalmente loco. La situación era demasiado excitante y yo sentía mi corazón latir muy fuerte. Parece que él lo notó pues me preguntó que si antes lo había hecho y le dije que sí, y me dijo que si se la mamaba y yo no quería hacerlo por qué me daba un poco de asco eso en aquel entonces y me lo pidió varias veces y le dije que no.
Después me dijo que entonces me la iba a meter y todavía me preguntó que si podía y le dije que si. Mientras esto pasaba yo lo seguía masturbando y me dijo «pues aquí ya bajate el pantalón», lo hice y saqué mi pantalón de una pierna y me puse en cuatro en el asiento de la camioneta, mientras qué él por detrás incado en el asiento y con el pantalón a los tobillos volteo a todos lados para ver si no venían autos y al comprobarlo me empezó a meter el dedo para dilatarme en lo que se la jalaba, me escupió el ano y se ensalivó el pito y me fue metiendo poco a poco su gran verga.
Yo solo estaba callado, no decía nada, solo quería que pasara y entonces poco a poco entró y sentí como me partía y me dolía pero no dije nada, me aguanté y entonces empezó a moverse despacio mientras me decía «que rico se siente tu culito, mi amor. Yo ya tenía mucho sin coger y tú estás bien apretadito».
No hubo besos ni caricias, solo me cogió como su perra, comenzo a darme pequeñas pero fuertes embestidas mientras yo miraba por la ventana que no vinieran autos, cada vez lo hacía más fuerte mientras jadeaba de placer, me sujetó fuerte de los hombros y me dijo al oído con una voz ya muy ronca y entre cortada «quieres que te los eche adentro o afuera», y le contesté que adentro pensando en no manchar la camioneta y él empezó a moverse más y más rápido entonces me presionó más y comenzó a gemir, bramaba como loco, le dejó de importar si alguien lo oía y solo gemía mientras me rebotaban sus bolas en mi culo.
Yo sentí como se venía y corría su semen dentro de mi mientas respiraba agitado de placer. Finalmente detuvo y se quedó unos segundos abrazado a mi espalda mientras qué su verga punzaba. Reaccionó y me la sacó y me dijo que qué rico hoyo tenía, que si la había aguantado toda, a lo que yo seguí callado. Él se subió el pantalón y yo igual y nos acomodamos, prendió la camioneta y nos fuimos a comprar las cervezas y luego al rancho.
Ya en el camino me dijo, «no le digas a nadie sobre esto» y le dije que no; comenzó a preguntarme que si ya lo había hecho con alguno de los otros trabajadores y le dije que no, me dijo después, «entonces ya te habían cogido verdad por qué bien que te sabes acomodar y aguantarla». Yo sonrei y le dije que si. Llegamos con mi papá, le dió las llaves y continuó trabajando con los demás al tiempo que yo me fui al baño a limpiarme y sacar los mecos.
Un par de veces más le volví a dar las nalgas, una vez incluso junto con una novia de él, pero ya les contaré luego.