A mis quince años pocas veces he sido penetrado, tal vez una o dos veces, por el contrario desde los 13 años me he culiado a más de un pelao de mi edad o un poquito mayor. La primera vez que tuve una relación completa fué con mi amigo Martín, completa pero haciendo yo de activo y unos días después apareció su primito: Alonso, y sin darnos cuenta los dos, le prometimos a Martin que algún día nuestros culitos estarían a disposición de él.

En mi ciudad, cuando llueve, las calles se transforman en aterradores arroyos ya que no existe alcantarillado para aguas de lluvias, esto lleva a que toda actividad se paralice y las gentes prefieran quedarse en sus casas a exponerse a un accidente fatal. Y, en medio de una lluviosa tarde de abril, sucedió lo que tarde o temprano tendría que suceder….

Ya les conté que Alonso es primo hermano de Martín, él y su madre residen en una pequeña ciudad a unos 50 kilómetros de la nuestra, la lluvía que había caido desde horas de la mañana había sido muy intensa, esto había permitido que los 3 hubiesemos estado prácticamente sitiados en el apartamento de Martín, quien de un momento a otro empezó a bailar y a cantar un estribillo «hoy como culito… de Memito y Alonso… hoy el culito de Alonso y Memito, son para mi».

LO MÁS RECIENTE

Inmediatamente recordé que hacía unos días le habíamos prometido que nos dejaríamos cojer de él. Nunca he dejado de cumplir una promesa, solo quería ver como mi amiguito le daría por su culo a su primo. Yo sabía que Alonso no era virgen, ya me lo había tirado unos días atrás. En fin, lanzamos una moneda a cara y sello: yo sería el segundo en ser poseído por mi amiguito.

Alonso se desvistió, sus ropas quedaron en el suelo, su verga estaba totalmente erecta, su glande rosadito buscaba el cielo, y luego de ello se recostó sobre la cama y Martín se enganchó a él penetrándolo de un solo envión; creo que el dolor que sintió fué muy grande ya que por sus mejillas rodaban unas cuantas lagrimas y se puso todo rojo.

Durante varios minutos yo veía cómo esa verga entraba y salía de aquel culito de muchacho, sus peloticas golpeaban con fuerza sobre las de Alonso arrancando gemidos de los dos, incluso de los tres pues yo me estaba jalando mi trozo mientras veía esa escena de porno en vivo. Luego pronto se derramó afuera del culo de Alonso y chorreó toda su leche sobre la cama.

Él quedó totalmente agotado. Los tres nos metimos a la ducha juntls, durante varios minutos nos besamos, nos acariciamos, nos tocamos, nos pechichamos; solo nos vestimos con nuestros bóxer. Pusimos en el DVD una película, y de pronto Martín se acercó a mi agarrando mi cara con sus manos, junto sus labios a los mios. Me llenó de besos y acercando su boca a mi oido, me dijó:- Ahora te toca a ti…

Mi experiencia con él fue deliciosa, sentir su verguita dentro de mi bombeandome me encantó.

TÚ TAMBIÉN PUEDES PUBLICAR TU RELATO

Escríbenos a redaccion@relaroticos.com  o da clic aquí y llena nuestro formulario. Puede ser anónimo o con tus propios datos para que más personas te contacten.

¡Comenta! (No es necesario registrarse, solo escribe el comentario y da ENVIAR)