Esto sucedió cuando yo tenía 16 años, mi mejor amigo llamado Angel era un año mayor, nos conocimos desde pequeños, su familia se vino a vivir de Xela a Guatemala y siempre fuimos grandes amigos. Lo que les contaré ocurrió una tarde que salimos del colegio que Angel decidió venir a mi casa a jugar Nintendo.

Ya en mi casa pasaron las horas y seguíamos jugando, mis papás salieron a hacer compras y nos quedamos solos. De tanto jugar, después de un rato nos aburrimos así que nos pusimos a ver la tele, estábamos cambiando de canal cuando de repente nos encontramos con una película porno, los dos nos vimos de reojo y solo sonreímos, nos sentamos en el sillón y nos pusimos a verla, después de todo estábamos solos.

Tanto mi amigo como yo somos bisexuales, aunque en ese momento no lo sabíamos.

Los actores de la película porno estaban bien buenos, la chava tenía unas grandes bobies, y el chavo tenía un cuerpazo que te hacia fantasear con él. Estaba tan concentrado viendo la película que ni me había fijado en lo que Angel hacia, cuando voltee para verlo me lleve una gran sorpresa al ver que Angel se estaba masturbando, y además él me miraba con una cara muy traviesas. Así nos quedamos viéndonos por un buen tiempo hasta que él tomó la iniciativa, se levantó del sillón y se acercó a mi, y me dijo: «¿queres chuparla?»

Debo aceptar que sentí extraño. Después de todo éramos mejores amigos desde la infancia y tenía un poco de miedo acerca de toda esta situación. Pero el morbo que me daba ver a Angel con su pene de 20 cm en frente de mi pudo más que cualquier otro pensamiento en ese momento, así que agarre su pene y me lo metí a la boca.

Me lo metí todo a la boca, sentía que me iba a ahogar pues era muy grande, lo lamia todo, desde el glande hasta sus huevos, Angel estaba disfrutando de la mamada que le estaba dando, gemía y agarraba mi cabeza como alentándome para que lo siguiera haciendo, a mi me encantaba oírlo gemir, me excitaba a mi también, así estuvimos por un buen tiempo hasta que Angel dijo que ya iba a acabar, yo le dije que lo hiciera en mi boca, pues quería probar su lechita en mi lengua.

Contrario a lo que le pedí, él la sacó y empezó a golpearla con mi frente, comenzó a masturbarse cada vez más rápido hasta que su semen acabo en mi frente y mi mejilla, luego pasó su pene por mis labios y pude saborear un poco de su delicioso semen.

Al final me hizo ponerme de pie y me dio uno de los besos mas deliciosos y excitantes que he recibido en mi vida, desde entonces lo hemos hecho muchas veces más y hemos gozado de otras cosas también, nuestra amistad tomó un camino diferente y somos más unidos que nunca. Casi parecemos novios, y me encanta disfrutar de estas experiencias con Angel, mi mejor amigo.

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