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¿Qué traje de baño me pondré?

Pensé que entraría al baño y bueno no lo q hizo fue delante de mi quitarse la ropa y quedarse desnudo frente a mi, ya mis ojos se quedaron fijos a su verga limpia larga y de color moreno.

Orgía en el baño de la prepa

Terminé de orinar, me lavé las manos y cuando iba a abrir la puerta para salir escuché ruidos al fondo, me di media vuelta y fui a ver que era, cuando llegué al último cubículo me quedé impactado, había 4 chavos dentro, 2 de ellos grababan a otro mientras recibía un grandioso oral.

Mi aventura con los del Copel

El ejecutivo me preguntó si de verdad quería hacer algo extremo, me dijo si quería participar en una orgía y yo me quedé en silencio pero decidí aceptar pero con dos condiciones que usarán condón y que no grabarán.

El hijo de mi socio

Fue él quien comenzó a chuparme el pene como nadie lo había hecho jamás y yo estaba excitado como nunca, quería correrme en el momento mismo, pero se quitó, se puso en cuatro, saco una crema de su mesa de noche y se la untó en el hoyo que ahora apuntaba hacia mi verga, la cual estaba dura como un tronco, todo un chocolate (por su color).

Claudio dormido

Le baje el calzón hasta la mitad de sus muslos, pude ver bien sus nalgotas. ¡No mames! Esa cola estaba de poca madre, súper grande y firme. Empecé a tocarlo y a tocarme también. Sentía que mi verga iba a romper mi pantalón en cualquier momento, así que me la saqué. La jalaba mientras le apretaba las nalgas a mi amigo.

Mi encuentro con el guardia del antro

Por su parte él se quito la camisa que llevaba y se desabrochó el pantalón, igual empecé a besar su cuello sus pezones peludos, besé su abdomen hasta llegar a su verga ya en erección. Era grande, 23 cm, la más grande que había visto, era hasta eso proporcional al tamaño de su dueño.

Mi vecino, el gringo virgen

Le empecé a quitar la playera, me encantaba ese torso güero y lampiño, besé de la boca pasando por su cuello, su pecho, pasaba mi lengua y besaba su abdomen, con mis manos empecé a bajarle el pants y fue entonces que vi esa hermosa verga 17 cm aproximadamente, tal vez más, era algo gruesa, su glande era rosado y tenía la circunsicion.

El chico guapo de la tienda

Entonces nos empezamos a agarrar la verga y las nalgas, Matías me agarraba tan rico mis nalgas y me decía al oído «qué ricas nalgas tienes, ya quiero jugar con ellas». Esa fue la señal.

Mi exprofesor de matemáticas 2: en el parque

Le empecé a lamer el glande él gemía y me decía que era increíble mientras yo podía sentir como latía su verga cosa que me encantaba aunque era difícil lograr meter esa verga en mi boca pero ya con relajación y práctica pude saborear más cada vez.

Mi exprofesor de matemáticas 1

Fue entre plática que me dijo que tenía yo muy bonito cuerpo y si hiciera más ejercicio estaría increíble. Le dije que él tenía un cuerpo muy sexy y él se levanta y me dice que no tanto.

error: ¡Hey! Jálatela, no te los lleves.