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Mi prima me regala a mi vecino

Soy un poco despistado, así que no me enteré que había nuevos vecinos en la cuadra hasta que una tarde vi a ese chico jugando Basketball por la ventana de mi habitación que daba a la calle.

A pesar de la distancia me percaté de inmediato que mi nuevo vecino era extremadamente bien parecido. Me estuve masturbando un rato mientras lo veía jugar hasta que decidí bajar y conocerlo.

A pesar de mi cordial saludo sólo me dijo «Hi» y continuó su práctica.

Mientras admiraba su físico, viéndolo lanzar la pelota justo en el aro una y otra vez, pensaba en lo mucho que se parecía al «David» de Miguel Angel, claro que por desgracia vestido.

Me bastó la forma agresiva de verlo jugar y su mirada de desdén hacia mi al saber que no practicaba deportes para perder toda esperanza de entablar siquiera una amistad con Paul como me enteré posteriormente que se llamaba.

En las tardes me conformaba con observarlo, sin ser visto, practicar desde la ventana y una o dos veces jugando con otro vecino y con el calor del verano prescindir de la camiseta, mostrando entonces su increíble forma.

Sucedió que la hija de una hermana de mamá, Alicia, fue invitada a pasar las vacaciones de verano en nuestra casa. De inmediato nos hicimos muy amigos Alicia y yo, al punto de confiarle incluso ser gay.

Ella siendo muy liberal no le dio ninguna importancia, diciendo que siendo gay confiaría incluso mas en mi que no siéndolo.

Sucedió que la bonita figura de Alicia y sus grandes ojos verdes llamaron de inmediato la atención de Paul, quien al sólo verla venir paraba su práctica para detenerla y poder conversar un poco con ella.

Posteriormente al confersarle a Alicia que Paul me atraía de sobremanera pero que él no mostraba ningún interés ni siquiera en dirigirme un saludo, se sonrió diciendome que no me culpaba por mi gran atracción ya que el muchacho era sumamente apuesto, pero aparte de eso no era distinto a los de su localidad, y todavía mas niño e ingenuo que aquellos.

Dos días antes del término de las vacaciones, Alicia me dijo que se sentía muy agradecida por todas mis atenciones y que antes de su regreso me tenía una sorpresa de despedida para el siguiente día.

Me indicó que a eso de las tres de la tarde me metiera en el clóset de su cuarto pero que dejara la puerta medio abierta para gozar de una vista panorámica y completa de esa habitación.

Que podía incluso sacar mi cel para grabar, pero que no prendiera el flash y que me mantuviera en completo silencio hasta que ella me indicara que podía bajar.

Al saber que la sorpresa incluía a Paul, estuve ansioso todo el día y al llegar las tres cumpliendo sus intrucciones subí al lugar señalado.

Diez minutos después mi corazón se heló al verla entrar en la habitación con Paul, cerrar la puerta con el pestillo y oírle decir a mi vecino que la casa estaría sola por sólo un par de horas por lo que debían actuar con rapidez.

Alicia aparentemente estaba enterada que podía dominar a Paul como quisiera porque cuando éste se acercó algo nervioso para abrazarla, ella le dijo que la excitaría de sobremanera si Paul le enseñaba primero su buen estado físico haciendo algunas flexiones para ella.

El sin dudarlo se tendió de boca en la carpeta y había ya empezado cuando Alicia lo detuvo y le dijo que no estaba en una clase de gimnasia en frente de su curso, que se desvistiera y continuara las flexiones de una forma que ella pudiera ver sus músculos.

Mi corazón casi se paralizó al verlo sacarse su t-shirt, y luego sus tenis y calcetines diciéndole a Alicia si los podía dejar fuera de la habitación para evitar el olor.

Alicia le hizo hacer 6 flexiones y luego le pidió que el resto lo hiciera sin nada encima.

Alicia, al notar la duda de Paul, sobretodo viéndola a ella totalmente vestida, le dijo fingiendo estar molesta que si no la quería complacer mejor se vistiera y se fuera.

Para mi goce, después de dudar un momento, se sacó los shorts, quedando sólo con unos calzoncillos blancos y ajustados en frente de ella.

Yo por mi lado con los dedos temblorosos apreté «record» mientras Alicia mostrando una cara de impaciencia le preguntaba si tendría que pagar para ver lo demás.

Oí entonces a Paul decirle si estaba bien con ella que él era circuncidado.

Por primera vez Alicia miró hacia mi escondite y sonriendo le contestó que si el tamaño era adecuado no le importaba, pero que se apurara porque la estaba enfriando con tanta espera.

Paul entonces se los bajó y los dejó caer a sus pies mostrando una preciosa verga que descansaba semi erecta sobre sus magníficos y semivelludos huevos.

Nada en mi imaginación era comparable a lo que veía.

Haciéndole un zoom a la cámara la centré por unos momentos en su exquisito miembro para luego volver a la vista completa.

Alicia, entonces, le dijo que estaba complacida con lo que veía pero que su verga estaba algo flácida y que ella tenía un remedio para eso.

A pesar que Paul se sonrió, no era lo que mi vecino pensaba, porque lo hizo voltearse dejando a la vista una espalda ancha y bronceada y un par de nalgas fuertes y musculosas casi sin vellos.

Entonces le pidió que apretara el trasero y tensara todo el cuerpo.

Mientras Paul obedecía manteniendose en esa posición por un largo rato con las nalgas contraídas como dos piedras y después con las piernas totalmente abiertas tocando con las manos el suelo, yo sentía mi verga querer explotar como un volcán, sobre todo al verlo tan expuesto con algo de pelo en la partidura y bastante detrás de los sacos.

Paul entonces decidió abandonar esta postura y avanzar hacia ella con el miembro ahora todo erecto.

Alicia le dijo entonces que ya la tenía muy caliente y que la excitaría de sobre manera verlo masturbarse por un rato.

Paul dudó por un momento pero luego comenzó a tocarse el miembro suavemente con la mano izquierda intentando no venirse.

Comprendiendo su intención Alicia se acercó entonces y rápidamente le paso las mano por los sacos y luego por el frenillo de la verga.

Paul se vio venir y notando que Alicia retiraba la mano, él mismo terminó su tarea apretando su miembro varias veces mientras liberaba con cada contracción un chorro de abundante semen.

Al acabar le rogó a Alicia que lo esperara un rato porque su intención no era esa, pero Alicia le comunicó que ya no había tiempo.

Eso si como un extra bono para mi lo hizo limpiar todavía desnudo, hincando en cuatro y con sus propios calzoncillos como paño el semen derramado en la carpeta.

Como Alicia es detallista con la limpieza, el show continuó por un par de minutos mas, período que yo mismo aproveché para tener una silenciosa pero exquisita venida.

Finalmente Paul decidió ponerse directamente los shorts, guardando su prenda interior en uno de sus bolsillos y luego abandonó la habitación.

Mi prima no hizo ningún comentario de lo sucedido, pero la noche anterior a su partida, me pidió prestado el vídeo para verlo a solas y reírse un rato. Al devolvérmelo en la mañana siguiente me pidió que le enviara por correo una copia porque el muchacho estaba bien bueno y quería divertirse mostrándoselo a algunas amigas.

Mi vecino sigue jugando basketball en las tardes, todavía casi no me habla, pero ahora cuando me canso de verlo practicar por la ventana me tiendo cómodamente en mi cama y comienza la verdadera función.

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