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Deslechando a Raúl, mi primo

«No mames, esta bien buena la vieja y yo que ando bien caliente… te imaginas casi 20 días sin coger y para acabar, llegó y mi vieja no está, son mamadas».

Mi primo, sus amigos y el mar

Ahí tras las piedras me abrazó pero esta vez le sentía un gran bulto a través del short mojado.

Entre primos nos amamos

Cada que mi primo llegaba me contaba con quién cogía y después me decía «mira, se me paró» y yo muy discretamente lo veía notando como se le miraba ese gran bulto.

Mi primo grabriel

Gabriel apagó la luz del cuarto y sólo quedó una lámpara de la cabecera. Nuevamente tomó cada quien su revista porno y seguimos viéndola.

Aprovechando que se quedó dormido

Una noche mi primo y yo nos quedamos viendo la tele, pero la verdad no había nada bueno. Al final nos quedamos viendo una película pero el se empezó a aburrir hasta que se quedo dormido en el sillón.

Trío con mis primos mayores

Él solo me regañó y me dijo que me callara por que alguien podía escuchar y después de eso me empezó a dar unas embestidas muy fuerte casi me desmayo.

Mi primo y sus 19cms

No dio ninguna reacción así que con mi cola usaba su bulto disimulando hasta que lo sentí tan rico, lo empecé a rozar y sentía como se iba endureciendo.

Masaje a mi primo José

Confieso que yo me derretía al tocarlo y fui bajando lentamente por su vientre, por su ombligo y llegué a una mata de vellos. Fue cundo él se quitó la toalla y quedó todo desnudo; pude ver que tenía una gran verga que para estos momentos ya estaba a todo dar.

Una noche de primos

«Pinche vieja, solo me calentó la cabrona, me la chupó y se salió y me dejó con ganas de coger… mira siéntela, esta bien gorda mi v*rga» Esa era la señal que estaba esperando.

En el sauna con mi primo

Fue ese día, el primero de marzo, cuando mi primo me marcó y me invitó a ir a un vapor que para relajarnos y tomar unas cervezas; yo tenía 19 años y él recién cumplía los 18. Éramos inseparables desde pequeños.

error: ¡Hey! Jálatela, no te los lleves.