Bueno, algunos recordarán el relato de mi amigo al cual convencí de chuparle la pija y el culo por mil pesos (ver el relato), la cuestión es que jamás le pague nada y siempre hablamos como si nunca paso nada.
A veces cuando me ponía borracho le movía el pedo para repetir la chupada de pija pero nunca quería, les recuerdo que el muy hijo de puta es muy mujeriego y todo ese tema. Hetero macho, del que se respeta. Es rubio, y tiene buena verga.
La cuestión es que el martes pasado pasé por el gimnasio en el que él trabaja y estaba él solo, por lo cual pasé a saludarlo como siempre lo hago (soy abogado, tengo 25 años y ando mucho afuera de la oficina por mi trabajo).
Yo: Qué onda enano, por que tan solo?
Juani: La vieja que trabaja acá conmigo se fue y me quedé solo, estoy por cerrar e irme a la verga ya.
(Eran las 5 de la tarde de un martes, o sea, el tipo es un zángano haragán).
Yo: jajaja, esta bien si, asi nomas son los nenitos de mamá que tienen dinero se pueden . (El tiene 20 y es un hijo de mami que tiene dinero jajajaja).
Por supuesto mientras hablabamos yo me hacia la cabeza que lo violaba entre las camisetas de futbol.
Yo: Ese dinero que te debo nunca más te voy a pagar eh, ni sueñes que te voy a regalar mil pesos jajaja.
Juani quedó rojo, azul, amarillo, nunca habrá pensado que sobrio íbamos a hablar de eso.
Juani: jajajaja, si todo bien, mientras no le digas a nadie ya me conformo. (Pobrecito, si supiera que su relato está en Relaroticos jajajaja).
Yo: Obvio boludo, yo no digo nada, vos sabes.
Bueno, hablamos un rato mientras tomábamos un café, el atendió unos clientes y se decidió a cerrar, primero bajó la persiana esa de metal y quedó solo la puerta abierta y la de vidrio. Apagó todas las luces y cuando nos estábamos yendo le agarre la pija y le dije:
Yo: Juani no aguanto más, quiero chuparte la verga otra vez, por favor te pido, te doy mil pesos ya.
Juani: Tas bien pendejo.
Yo: Dale por favor cabrón!
Mientras le decía eso le volví a agarrar la pija y ahora estaba muuuuuuuuuy dura, encima que es grande.
Juani: Eres una mierda (nunca se rio ni nada, no sabia que pensar yo), deja cierro.
Cerró la puerta completamente y nos fuimos a un baño que tiene atrás, le baje el pantalón y comencé a chupársela de una manera desenfrenada, no me importaba nada, hasta la garganta me la metía.
Él me pedía que se la chupara más despacio que estaba por acabar, al parecer el tipo estaba muy caliente. Seguimos así un buen rato, me senté en el inodoro, le pedí que se diera vuelta y le chupe el orto como media hora, mientras él gemía como un perro en celo, muy loco.
Le encantaba que le chupara el culo bien virgen. Nuevamente se vino en mi boca y yo deboré toda la leche que me aventó. Yo me lave la boca y salimos.
Ahora le debo dos mil pesos, y espero llegar a diez mil.