Relatos eróticos gay en español
Me llamo Anny, tengo 38 y desde los 13 años tengo la fantasía de vestir completa para alguien… siempre he vestido, al inicio tanguitas, pantis, brasier, etc, con el tiempo llegué a hacerlo completamente, pero para observarme y saciarme con Leer más
Estuvimos platicando mucho y notaba el nerviosismo del joven, cómo si me conociera pero yo no lo ubicaba de ningún lado. Terminó la cena y me fui a casa a dormir.
Me dice, «sabes tengo muchas ganas de experimentar con una persona como tu». Total le pregunto ¿cuantos años tienes? Y me dijo 17, por lo cual me entró la la curiosidad. Para ese momento le digo «voy a fumar un cigarro» y me dice «te acompaño».
Al llegar los metí a mi cuarto y empezamos a platicar un poco; yo no tenía un poco de miedo o desconfianza y ya la plática ellos me dijeron que era el tío obviamente el mayor y el otro era sobrino y ahí fue cuando les pedí que me dijera su edad “ya dime cuántos años tienes no hay problema si está chiquito” pero él me decía que si tenía 18.
Me sentía tan mujer en sandalias blancas de tacón, pantimedias blancas con encaje hasta la parte alta de mis piernas, brillo labial, el tintineo de los aretes, anillos, y muchas ganas de experimentar mi primera penetración. Recosté mis manos sobre su pecho y rasque sus pezones.
Pasado un ratito de estar con los videos me mandó un mensaje diciendo «te compro unas tangas y un babydoll para que hacer lo de los videos o qué.» Tenía en mi mente tener relaciones con él pero ahora sabía que quería metérmela, la idea no me disgustó, de verdad, quería experimentar.