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Complaciendo a tres negros

Yo miré a Luis con su verga en mi boca, como diciéndome «deja que hagan con mi culo lo que les de la gana». Luis entendió y me dió una rica cachetada y me dijo «eres una asquerosa perra». Luego escupió mi cara, sacó su rica y gruesa verga de mi boca y me escupió dentro de ella y luego otra vez en la cara y con su mano restregó su saliva por toda mi cara e hizo que volviera a meter su verga en mi boca.

En el Ejército de salvación (2)

Confieso que no estaba sintiendo mucho dolor, más bien el morbo de tener dos pichas en mi y mamar dos más me tenían lujurioso y en eso les pedía que me cogieran como ellos querían y ya empezaron a meter y sacar la picha sin ningún trabajo.

Dándole placer a todos

En medio del camión había un potro de estos de hacer gimnasia, y todo al rededor pijones enormes apuntando hacia el centro del camión, me agarró el camionero y me tumbó sobre el potro, dejando mi culo al placer de todos.

Tres jóvenes hermosos solo para mi

Eran más altos que yo, rondando el metro ochenta, y los tres vestían con bermudas, algo bastante común en aquella época del año en La Paz (Mendoza). Uno de ellos abrió el maletero y sacó una gran toalla que extendió en el suelo, pidiéndome que me acercase para comenzar con el juego.

La orgia del cibercafé

Todo eso era confuso, era como otra parte d mi que me tenía ahí viendo a un montón de machos comiéndose entre ellos, era de verdad una sensacion rara.

Con mis amigos viendo porno

“Coger por el cul0 con tías sí y con tíos lo pienso probar, pero yo solo doy”. Ernesto, que era el mas lanzado propuso “podíamos echarlo a suertes y al que pierda nos lo follamos”.

Me violan en los separos de la policía

El «jefe» le indicó a los 3 secuaces que me agarraran, y hay comencé a entender lo que querían hacer. Me obligaron a hincarme sobre mis rodillas frente a él.

Los hermanos de mi amigo me forzan

Fue cuando comenzaron sus embates de loco, yo presentía que iba a acabar, pero justo antes de que sucediera, suena la puerta, eran sus hermanos de 16 y 17 años.

Historia de un sumiso: orgía

Me quedé tendido en el suelo, intentando coger aire y respirar, mientras de la boca me salía semen y del culo también. Mientras, los cuatro chavales se reían de mí, incluso alguno me escupía, a pesar de no saber quien era.

Mi despedida de soltero se volvió orgía entre amigos

Era mí despedida de soltero, y mis amigos habían organizado la más típica y protocolaria despedida de soltero. «Una gran boda gay, merece una gran despedida gay» habían dicho, y yo sabiendo que era inútil llevarles la contraria les había dejado hacer a su antojo.

error: ¡Hey! Jálatela, no te los lleves.