... ...

La orgía de los osos

Era una mañana como tantas otras, fria ,con un monton de nubes guindadas desde el cielo, recordaba con nostalgia a Ernesto, aquel hombre grande y maduro, al que atisbaba todas…

Satisfaciendo a mis compañeros albañiles en la construcción

El sábado pasado, como todos los sábados, después de terminar la jornada nos pusimos a beber unas caguamas y después de varias me sentí borracho tanto que me dieron ganas de orinar y fui junto con dos de los compañeros. Ahí no pude evitar mirarles la verga a los dos.

Todos sabemos que Xavi la chupa con madre

Xavi la come que te cagas, y eso en mi grupo de amigos lo sabemos todos. La verdad es que yo prefiero las mujeres pero ya me mata la curiosidad.…

La fiesta hétero que se convirtió en orgía bisexual

Les quiero compartir mi primer relato. Mi nombre es Marco y tengo 40 años. Soy pasivo, delgado, alto y moreno. Esto comenzó hace unos años con el esposo de mi…

Doce albañiles y un putito

No evite sentirme atraído a entrar a aquella construcción, no conocía la razón del magnetismo que me llevo hasta los escombros y laberintos de ese edificio en construcción cuando solo…

Ramón y los amigos de mi hermano

Esto paso hace unos meses, en medio de la pandemia, mi hermano suele traer a la casa a su novia y amigos para tomar, fumar y distraerse después del trabajo,…

Volviéndome puta en pleno cine

Una ocasion andando por el centro entre al cine Rio, estaba muy oscuro, entre a la parte de abajo, en lo que mis ojos se acostumbraban al cambio de luz…

Mis pants deportivos calientan a cualquiera

Para recordar cómo fue la primera vez no fue romántica pero si mucho sexo y mucha acción desde los 16 empecé hacer halterofilia cambio mucho mi cuerpo hace unos meses…

Estrenando mi gran juego de mesa sexual – parte 7 final

Empezó directamente a trabajar en la de su amigo, mientras que masturbaba a Rodrigo y Leo, estuvo así varios minutos, rotando entre las vergas de los cinco, alternando entre sus manos y boca hasta que, al terminar de chupar la de Miguel.

Estrenando mi gran juego de mesa sexual – parte 6

Mi nuevo reto decía: Deja que el jugador de tu izquierda juegue con el maseajeador prostático durante dos minutos, sin correrte. 4 puntos. Yo mismo había escrito ese reto, así que lo busqué entre mis cosas y se lo entregué, me quité el short y me tumbé bocarriba en el suelo, dejando al aire mi entrada, mientras que mi erección era contenida por la tela del suspensorio.

error: ¡Hey! Jálatela, no te los lleves.