Don Manuel, el señor de la tienda y como me abusó

Don Manuel es un español que es dueño de la tienda del barrio, es un tipo alto, gordo y uy peludo, yo iba frecuentemente a comprar ahí porque mi mamá me mandaba por cosas, Don Manuel simpre tuvó demasiadas consideraciones conmigo desde niño hasta que ya más jóven.

Él empezo a insinuarme cosas, yo en esa época tendría 17 años, soy blanco, gordito y y sin vello en mi cuerpo, mi cuerpo empezo a ensancharse de las caderas y mi trasero a crecer un poco más de lo normal, mis amigos hacían burlas de mi trasero porque decían que era de mujer y algunos me lo tocaban y se repegaban a mi haciendome sentir sus miembros duros en mis nalgas, yo fingía molestarme pero me fascinaba eso y a propósito los provocaba, siempre fueron juegos hasta que Don Manuel me dijo un día que fui por algunas compras me dijo.

-Vaya que te has puesto todo un joven…se te miran unas nalgotas bien ricas chaval-

-¡Pero Don Manuel que cosas dice…¡, contesté sorprendido ante aquello

-No tehagas, sí bien que he visto como los chavales se repegan a ti y tu bien que les paras la cola.

-¡ No..eso no es cierto..ellos se aprovechan de mi pero yo no me dejo hacer eso…¡

-¡Mira….quiero que veas esto a ver si tegusta¡

Y yo como tonto fui hasta atrás de la vitrina que hacía las veces de mostrador y ví lo que Don Manuel me mostraba, sentado en un banco el muy malvado se había sacado su miembro el cual lucía colgado ligermante hacia abajo, hipnotizado por aquello no podía dejar de ver aquel enorme miembro que poco a poco iba levantandose ante mí, grueso, lleno de venas y con una cabeza enorme que empezaba a aparecer por la punta y lleno de pelo por todos lados.

-¿ Te gusta verdad?…..¡ven, acercate y tócalo…es tuyo…anda ven aqu텡

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Yo no atinaba a hacer nada, estaba como ido ante aquella visión, no podía dejar de ver esa enorme cosota la cual Don Manuel ahora tocaba descaradamente descubriendo la enrome cabeza que parecía manzana, su miembro ahora estaba completamente erecto y era considerablemente enorme, completamente dominado por esa cosota que parecía mirarme con su único ojo camine hacíe él y en cuanto estuve frente a Don Manuel él me tomo por los hombros y me hincó enfrente de esa descomnal vergota.

-¡Anda, tócala con tus manitas…así…así..aaahhhhhh….ahora dale un besito en la punta…anda no tengas miedo….bésala…besala….¡-

-No…no…por favor Don Manuel eso no…yo nunca he hecho esto…no…noo..no me obligue por favor….¡- me resistía mientras Don Manuel empujaba mi cabeza hacia su cosota hasta que mis labios tocaron la tersura de su cabeza y completamente dominado empezé a besar y a dejar que su vergota se fuera introduciendo más y más.

-¡ Aaaahhhhh….así mi niño…así…aaaahhhh….te la estas comiendo toda….chupa..lame bien tu verga…de ahora en adelante esta es tu verga…aaahhhhhh…así…asíii…aaaahhhhh¡-

Yo me sentía ahogar con todo aquello metido en mi boquita, sentía que me la había comido toda pero solo tenía la mitad adentro y el muy malvado seguía empujando para que yo tragara más, poco a poco fui aprendiendo como chupar y lamer mientras Don Manuel con sus manos en mi cabez marcaba el rito de las metidas de su verga en mi adolorida boquita.

-¿Aaaaaaahhhhhhh…que rico mamas verga mi ‘jito…yo sabía que te iba a encantar el chile…aaaahhhhhh….¡

La locura llegó cuando una sus manos se metió debajo de pantalón y truza y llegó a mi colita, su dedo empezó a meterse en mi culito mientras yo inutilmente trataba de apretarlo para evita aquella introducción, me vencí y deje que su dedo entrara de lleno en mi culito asi con verga en mi boca y su deo en mi culito seguí mamando verga casi en la entrada de la tienda de Don Manuel con el peligro de que alguien entrará y viera la vergota de Don Manuel metida en mi boca y yo subiendo y bajando a lo lago de aquella espantosa y gruesa vergota.

Pasaron minutos que se me hicieron eternos hasta que Don Manuel con un gemido me avisó

-¡Me vengo…te los voy a echar…..me vengo…ya…ya….aaaaaahhhhhhhhh..me estoy vaciando mi reyna….aaaahhhhhhh….tómalos putita……aaaahhhhhhh….tragatelos…comete la leche de tu dueño….aaaahhhhhh……así…así….aaaaaahhhhhhhh…..¡-

En ese momento sentí como su verga se hinchaba más en mi boca y un líquido caliente, salado y espeso me inundaba la boca y garganta, instintivamente me quise zafar pero Don Manuel con ambas manos me pegó más a su vergota y para no ahogarme empecé a tragar aquello.

-¡Que rico mi reyna….te los tragaste todos…pocos se tragan la leche pero tu si….aaahhhh…yo sabía que eras una golosa y putita además….ay eres mía…ya tiene las marca de mis mecos dentro de ti,…ya los probaste…ya eres mi putita oficial…yo sabía que eras putito…jamás me equivoco…aaahhh¡-

Ahí estaba yo sentado ante el flaccido miembro de Don Manuel que aún goteaba semen por la punta y yo con mi boca con sabor a leche de macho y algunas gotas en mis mejillas.

-¡Como es malo conmigo…¡…¿Porqué me hizó esto…?…¡me obligo a comerme su verga y su leche….¡…¡Ahora que voy a hacer…?…¡ya me hizo mujercita…que bárbaro es usted…¡

-¡No mi reyna, aún no eres mujercita….mañana vas a convertirte en mi putita…mañana que te meta la verga y te reviente ese culito tan rico que tienes….¡

-No eso no….por favor…eso no…se lo suplico…si me mete esa cosota en mi colita me va a lastimar…la tiene enorme y no me va a caber…ya se la mamé…ya se la chupe y me comi sus mecos por favor conformese con eso….¡….¡si?-

-No te preocupes mi reyna…mañana seras mía…ahora vete, no vayan a venir a buscarte y ya sabes, mañana te toca verga…¡-

Como pude me limpié la cara y me fui de ahí con la boca sabiendome a leche de macho y sabiendo que al otro día perdería la virginaidad de mis colita y mi independencia ya que a partir de ese momento yo ya era propiedad de Don Manuel