Con mi primo a todas horas
Pensé que eso sería suficiente, pero la tentación fue más y volví a su habitación y ahí seguía pero ahora tenía una enorme erección que invitaba a repetir todo.
Relatos eróticos gay en español
Pensé que eso sería suficiente, pero la tentación fue más y volví a su habitación y ahí seguía pero ahora tenía una enorme erección que invitaba a repetir todo.
Él me dice «tápate wey, que asco» y empezó el juego de arrimarle el pene mientras que él me decía que ya me cambiara y en ese juego le agarró el paquete y para mi sorpresa detecté que ya lo tenía duro.
Iba yo camión al trabajo como eso de las 5:20 de la mañana. Justo al tomar mi camión en la esquina de mi casa estaba otro chavo como de unos 30 o 33 años, con la misma complexión que yo; llevaba puesto un pantalón pegado al cuerpo por lo que se le veía un buen culón.
Me cambié de compañía de internet y el chico que fue a enchufarme el módem, me terminó enchufando otra cosa…