Siempre estuve enamorado de mi hermano

Hola, mi nombre es Miguel y actualmente tengo 19 años pero quiero contar un suceso algo inesperado que ocurrió cuando yo tenia 13.

A mi siempre me gustaba jugar con mi hermano mayor, el cual se llama José, y nos divertíamos cada día más. El es mayor que yo por 5 años así que siempre lo veía como mi “héroe”.

Un día mi mamá tuvo que confesarle algo a nuestra madre (que descanse en paz), y fue que el es homosexual. Yo le pregunté sobre eso pero el siempre evadía la pregunta pero eventualmente me contó. Con el tiempo fui descubriendo que también sentía atracción romántica hacia los varones, pero hasta el día de hoy sigo pensando que mi hermano influyó de manera indirecta.

Un día el regreso de la preparatoria y me armé de valor y le dije: “¡Yo también…! Yo también soy gay…”. El solo me miró con una cara de asombro, dejo salir una risita y después me miró con ternura; “¿Será que no me quieres hacer sentir solo? Quiero decir, ¿estás realmente seguro?”
Yo me llené de vergüenza y sin pensarlo le dije: “¿Te puedo dar un besito…?” Me puse colorado en ese momento, y el me dio una cara de extrañado pero después se enterneció. Se acercó a mi y puso su frente contra la mía, frotamos nuestras narices y me dio un tierno pero breve beso en los labios. Yo estaba sin palabras y el solo se rió; “No le vayas a decir a mamá, ¿entendido?” Yo solo asentí con la cabeza.

Con el paso del tiempo las cosas se empezaron a poner picantes. Una vez cuando nos dejaron a ambos solos yo me acurruqué con el y con mucha timidez puse su mano en su pelvis. El no hizo nada, en su lugar me abrazó aún más fuerte y me dio un besito en la frente… momentos después nos empezamos a tocar mutuamente y yo la verdad no sabía que hacer en realidad. El me veía con ternura y me sentí seguro, sentí que esto lo hacía con todo su amor y no tenía intenciones oscuras como violarme y en eso estaba yo en lo cierto. Después no volvimos a acurrucar y yo le dije: “Te amo…” y me respondió con: “Yo también”. Me dio un último beso en los labios y después actuamos como si nada hubiese pasado pero con algunos toqueteos frecuentes, y solo esperábamos a nuestra madre.

Actualmente me llevo muy bien con el y aveces se me insinúa pero no tiene malas intenciones y eso lo se. El ya tiene pareja, pero aveces hace algo que me lastima el corazón un poco: me da un beso en los labios y me dice: “Amor de hermanos, eso no cuenta como engaño, ¿no?”.

Gracias por tomarse el tiempo de leerlo y la verdad nunca se lo había contado a nadie. Adiós.