... ...

Short: en la cama con mi padre

Con mi padre dejamos de vernos cuando él se separó de mamá y se fue a vivir a otra ciudad, nunca me contaron los motivos e su separación, no lo volví a ver durante mucho tiempo. Hace un mes buscando un nuevo departamento me lo encontré en mi misma situación en el edificio en que se arrendaba un dpto que me gustaba.

Ambos no lo podíamos creer, conversamos mucho esa tarde, yo no le guardaba rencor así que la conversación fluyó. Me contó que estaba soltero, no se había vuelto a poner en pareja y como había sido trasladado a la ciudad por trabajo, necesitaba arrendar algo, yo le conté que también necesitaba arrendar porque había terminado mi relación con mi exnovia y quería alejarme lo más posible de ella. Esa misma tarde decidimos arrendar juntos el dpto, tenía dos dormitorios, un baño y era lo suficientemente amplio para nuestras necesidades.

Nos instalamos a vivir juntos y al poco tiempo ya nos lo pasábamos en grande los dos juntos, comprábamos algunas cervezas, mirábamos futbol, salíamos a correr, íbamos al mismo gimnasio para mantenernos en forma etc.
Una noche, estábamos recostados en mi cama mirando una película en que aparecían dos hombres gay teniendo sexo, aunque no era explícito, no era una porno.

Mi padre miraba atentamente la película yo también, sólo mirar como se besaban y se acariciaban los hombres en la pantalla me excitó mucho y noté que a papá también, quería decirle que se fuera a su habitación para poder pajearme, pero tenerlo a mi lado me provocaba una extraña sensación aumentaba mi calentura, en un momento dado nos miramos – estoy muy caliente – le dije a mi papá sin tapujos, él mirándome directo a los ojos, respondió – yo también estoy que reviento de caliente – sin más palabras ambos nos quitamos el pantalón deportivo y los calzoncillos y quedando desnudos de la cintura hacia abajo nos comenzamos a pajear, nos mirábamos calientes y noté que papá se quedaba mirando con los ojos abiertos mi pene, se pasaba la lengua por los labios, no hubo lugar a dudas, cuando papá se levantó de la cama, untó sus dedos con su saliva y se sentó sobre mi verga completamente erecta, sentí que el placer me inundaba por completo mientras mi pene era atrapado por ese culo hambriento. Lo penetré durante casi toda la noche y desde ese día somos amantes.

error: ¡Hey! Jálatela, no te los lleves.