Me desperté con una vrg* en el cul*

Hace unos dias fue el cumple de mi hermana mayor y vino toda la familia, yo tengo 19 años, soy gay toda mi familia lo sabe y pues todos normal con eso. En fin durante la fiesta bebimos mucho hasta emborracharnos, en eso de las 2 de la mañana me voy a la cama a dormir, saben que cuando hay fiestas todos duermen en una misma casa, en mi habitacion estaban unos primos pequeños dormidos en un colchon inflable y yo estaba supuesto a dormir con mi tio, el hermano de mi  papá, pero el seguia tomando con la familia. Con la cabez dando vueltas me quité la ropa y me dormí con boxers y medias.

Comienzo a soñar que me estan tocando y chupando las tetillas, eso me encanta, luego sueño como se desliza una verga dentro me di, me duele pero me gusta como me abre completito, cuando creo que el sueño se va a acabar abro los ojos y me doy cuenta que de verdad tengo un hombre detras de mi culiandome duro, me tiene abrazado por la cintura y veo su brazó peludo como me sujeta, me doy cuenta que es mi tio, al escuchar como dice mi nombre, se me escapan unos gemidos pero me hago el dormido asi puedo seguir disfrutando de la culeada, trato de no gemir muy fuerte pues mis primos pequeños estan dormidos frente a mi.

No se en que momento me volví a quedar dormido, pero cuando desperté la luz del sol entraba por la ventana, me sentía lleno como si hubiese estado comiendo toda la noche, mis primos aun dormían, me intenté mover y sentí un dolor en mi ano, cuando miré aun estaba con la verga de mi tio dentro con la erección mañanera, asi que lentamente me paré, tomé una toalla y fue al baño, cuando me senté en el inodoro saque un buen de leche, mi tio seguro se vino varias veces durante la noche, cuando vi lo que solté era todo semen con manchitas rojas, me bañé. Cuando salí me encontré con mi tio que se veia avergonzado. «Disculpame Benja es que tenia tiempo con los huevos bien cargados y estaba borracho, no me pude controlar, por favor no se lo cuentes a nadie». Le dije que no se preocupara que yo entendía, cuando terminé de hablar con mi tio todo parecio volver a la normalidad pero luego mi primito de veinte menos cuatro, me dijo «Si no quieres que le cuente a nadie que te dejaste coger por mi papá, te tienes que dejar coger por mi, los vi anoche», tuve que aceptar pues mi papá me echaba de la casa si se enteraba de eso.

«Oye José está bien lo haré contigo pero no le digas a nadie de esto» le dije a mi primo. «Dale Benja ven para la cama y te cojo». Le pusimos seguro a la puerta y fuimos a la cama, allí se bajó el bóxer y le rebotó una verga ancha con mucho pelo negro, me sorprendí por el tamaño que tenía para su edad, de veinte menos cuatro. «Chupala benja» me pusé de rodillas y la tomé con mi mano, a penas podía encerrarla bien de lo ancha que era,

«Es de familia primo, apuesto a que disfrutaste la de mi papá» yo no respondí y comencé a larmela, tenía el olor a verga en la mañana pero era rico, mi primo no duró mucho tiempo en abusar de mi y me tomó del cabello y me la metió toda hasta la garganta, mi nariz llegó hasta entrerarse en sus vellos y devuelta, comenzó a embestirme y yo traté de no tener arcadas mientras sus huevos chocaban con mi quijada cada vez mas duro. Me la sacó cansando «ponte en 4 primo»

Me puse como me indicó, escuché el escupitajo y como me lo untaba en la entrada, «despacio por favor aun me duele» comenzó a entrar lentamente y me soltó una nalgada, «uff primo, estás bien flojito mi papá de dejó reventadito y yo te voy a abrir mas», me sentí super lleno con su verga ancha, mi primo no tuvo piedad y me comenzó a coger duro desde el inicio, me tomaba de la cintura con una mano y del cabello con la otra. «Ay que putita que eres Benja, de ahora en adelante solo te dejarás coger por mi, te voy a coger tantas veces que tu culo tomará la forma de verga para solo aceptarme a mi, cada vez que venga tienes que recibirme empinadito y lleno de lubricante, uff» José no aguantó mucho mas y me apretó fuerte del cabello y con tres embestidas se vino dentro, se ma sacó agitado y se sentó a mi lado cansado, ahí estaba yo con la leche de mi primo donde antes estala de mi tío. «No puedo esperar a volver Benja, tu oyito es ahora mio». Y me sentí bien rico por tener un macho con tremenda verga para mi.